Existes distintos tipos de dieta proteica o dieta hiperproteica o dieta de proteínas:
- Aumento del consumo de proteínas y disminución del consumo de hidratos de carbono y grasas.
- Aumento del consumo de proteínas y grasas y disminución del consumo de hidratos de carbono.
“PROS”
- Las proteínas producen gran saciedad y este hecho ayuda a comer cantidades más pequeñas por disminuir la sensación de hambre.
- Al limitar el consumo de hidratos de carbono, el organismo utiliza las grasas como fuente de energía por lo que la pérdida de peso puede ser más rápida que con otro tipo de dietas.
- El aumento de la cantidad de proteínas en la dieta favorece el incremento de masa muscular.
- Efecto antiinflamatorio por la restricción de alimentos que contienen gluten y azúcares.
“CONTRAS”
- Son dietas con bajo aporte de fibra, minerales y vitaminas y pueden producir carencias si no son suplementadas.
- Alguna de las consecuencias negativas que pueden presentarse son: aumento del ácido úrico y cálculos renales.
- Estas dietas están contraindicadas en caso de tener alguna alteración renal porque el exceso de proteínas podría empeorar su función renal.
- Si se siguen durante mucho tiempo y sin supervisión por un especialista, puede haber pérdida de masa muscular porque cuando disminuye la cantidad de grasa del organismo, éste empieza a utilizar los aminoácidos del músculo como fuente de energía.
A la hora de decidir hacer este tipo de dietas, es fundamental ponerse en manos de un profesional de la nutrición que nos guíe; nuestras necesidades son distintas según edad, sexo, actividad física… así como qué tipo de proteínas son recomendables. En general, para una persona sana y seguidas por un corto período de tiempo, las dietas proteicas no tienen por qué ser perjudiciales pero es necesario que el profesional valore el estado de salud general para determinar si esta dieta es apta o no.